Por Ron Holladay

El 3 de junio los votantes de California enfrentarán dos opciones para reformar el concepto de dominio eminente. La proposición 98, puesta en la boleta electoral por las compañías constructoras y los arrendadores es un golpe devastador dirigido contra los inquilinos. La 98 terminaría con el control de rentas, afectando a millones en lugares como San Francisco, Los Angeles, Berkeley y Santa Mónica. Puesta en la boleta de elección para "reformar" la ley de dominio eminente, la 98, si fuera aprobada, terminaría con los Irak y Afganistan - guerra sin fin? desalojos por causa justifi cada y la prohibición de desalojar inquilinos ancianos y minusválidos. No en la 98 está apoyada por La liga de Mujeres Votantes (The League of Women Voters), AARP, Red de Acción de Ancianos (Senior Action Network), Unión de Inquilinos de San Francisco (San Francisco Tenants Union), el Consejo Laboral de San Francisco (San Francisco Labor Council), el Club Sierra (Sierra Club) además de docenas más de grupos. La proposición 98 también acaba con los requisitos para que las compañías constructoras provean habitación a precio razonable y muchas protecciones ambientales, incluyendo leyes a favor de moradas para animales y plantas y terrenos pantanosos.

En su reunión regular del 6 de abril en Los Angeles, el Comité Central del Partido Paz y Libertad (Peace and Freedom Party) decidió apoyar el "No en la 98 y Sí en la 99". La proposición 99 fue puesta en la boleta electoral como una medida táctica para reformar dominio eminente, además de que contiene lenguaje que anula los ataques de la proposición 98 contra el control de rentas, inquilinos, ancianos y el medio ambiente.